Cooperación metabólica en el folículo ovárico
Los oocitos
humanos se desarrollan en los folículos ováricos, rodeados por células
granulosas (CG). El desarrollo coordinado de todos los tipos de células de un
folículo es crucial para la posibilidad de ovular un huevo fértil y por
consiguiente para la reproducción normal o asistida. Los detalles de la
interacción metabólica con las rutas de señalización
son útiles para la prevención y tratamiento de la infertilidad y para el
mejoramiento de los métodos de
reproducción asistida. Las CG crean una clase de barrera protectora y una
plataforma de comunicación entre el oocito y el microambiente extra-ovárico.
Ellas proporcionan nutrientes y moléculas de señalización para el oocito y
juegan un rol esencial durante la penetración del espermatozoide. Estos hechos
hacen a las CG atractivas para la investigación porque el conocimiento de su
función esencial en la reproducción y su metabolismo pueden proporcionar un mejor
entendimiento sobre cómo las CG protegen al oocito durante la maduración y cómo
contribuyen al desarrollo normal de un embrión humano.
Los folículos ováricos primordiales están
presentes en el nacimiento como una reserva de oocitos primarios para la vida
reproductiva de la mujer. Los oocitos, en el estadio de folículo primordial, se
encuentran en la profase de la primera división meiótica y rodeados por una
capa simple de CG escamosas. La maduración de los folículos ováricos
(foliculogénesis) continúa con el desarrollo de los folículos primordiales
primarios en folículos secundarios antrales grandes. Los folículos comienzan
como sacos esferoidales llenos con líquido folicular y conteniendo oocitos. Los
oocitos en los folículos primarios preantrales están rodeados por una capa simple de células
cuboidales llamadas CG preantrales. Los folículos primarios gradualmente se
desarrollan en folículos secundarios formando el antro mientas al mismo tiempo
los oocitos crecen en tamaño. Durante este proceso, las CG incrementan su
actividad mitótica. Ellas se dividen en dos poblaciones: (1) células granulosas
murales (CGM) que forman la pared del antro y (2) la población de células
granulosas del cúmulus (CGC) que rodean al oocito.
En humanos, cuando un folículo alcanza el
tamaño de folículo de De Graaf y el oocito alcanza aproximadamente 100 µm de diámetro, se inicia la ovulación
después de un pico pre-ovulatorio de hormona luteinizante (LH). Los oocitos se
detienen en la segunda metafase meiótica. La ovulación es coordinada por
procesos fisiológicos y bioquímicos con una participación activa de las CG.
Unas pocas horas antes de la ovulación, el complejo cúmulus-oocito inicia la
síntesis y ensamblaje de una matriz extracelular altamente viscosa y rica en
proteínas y proteoglucanos como hialuronano, un glucosaminoglucano no sulfatado
importante para la penetración del espermatozoide. Su principal componente es
el ácido hialurónico, un gran glucosaminoglucano polianiónico
grande, sintetizado por CGM y CGC y responsable de la expansión del cúmulus ooforus.
El oocito es expulsado por el folículo
de De Graaf y luego fertilizado por un espermatozoide en el oviducto. No solo
el oocito maduro sino también las células del cúmulus que lo rodean secretan
quimioatrayentes de espermatozoides, a los cual son sensibles los espermatozoides humanos. Un ejemplo es la progesterona, la
cual actúa como quimioatrayente de espermatozoide en concentraciones
picomolares.
La maduración del oocito es un proceso corto
y dinámico, el cual ocurre con una maduración sincrónica del núcleo y el
citoplasma y muchos cambios bioquímicos. Durante la transición de folículo
primario a folículo secundario maduro, regulada hormonalmente, el oocito tiene
un incremento en su síntesis de ARN y acumulación de ARN y proteínas. La
primera división meiótica incluye la formación del huso de metafase I y su
migración a la corteza de una manera dependiente de actina con la posterior
expulsión del cuerpo polar. Una dramática reorganización del sistema endomembranoso
ocurre: el complejo de Golgi experimenta una sustancial reorganización entre el
estadio de vesícula germinal (VG) y el estadio metafase II (MII). Durante la
maduración del oocito también ocurre una reorganización del retículo
endoplásmico (RE) incluyendo una remodelación del RE en los característicos
“clusters” corticales. Este proceso está entre las modificaciones esenciales en
el ooplasma previas a la fertilización.
Las CG juegan un rol crucial en el soporte
ambiental de los oocitos maduros. Un estudio in vitro reciente demuestra una
mejor maduración de los oocitos humanos cuando son co-cultivados con CG aisladas de oocitos maduros. En los
oocitos en crecimiento hay una configuración de cromatina descondensada
(nucléolos no rodeados, NNR), mientras en un oocito con crecimiento completo,
antes de la maduración del oocito, la actividad transcripcional cesa y la
cromatina en la VG rodea al nucléolo (nucléolo rodeado (NR) y progresivamente
se vuelve condensado. Durante este período de quiescencia transcripcional las
CG proporcionan nutrientes y moléculas de señalización reguladoras al oocito,
y contribuyen a la maduración nuclear y
citoplasmática del oocito. Los metabolitos de glucosa (por ejemplo, piruvato),
lípidos, nucleótidos y colesterol proporcionados por las CG son importantes
para la transición de profase-I a vesícula germinal degradada (VGD) para pasar
a metafase-I y progresar a través de
anafase-I/telofase-I a MII.
Hay una fuerte evidencia que durante la
maduración del oocito las CG secretan factores importantes al medio para el
desarrollo del oocito. Los
investigadores han detectado 369
compuestos bioquímicos diferentes en las CG de los cuales 173 han sido
detectados en el medio de maduración. Significativos cambios han sido descritos
en el medio de maduración y las CG durante la maduración, la mayoría de ellos relacionados con el metabolismo
de aminoácidos, carbohidratos y lípidos.
En las CG se han descrito incrementos de muchos aminoácidos
(especialmente glutamina, leucina e isoleucina durante las primeras ocho
horas), UDP-glucosa y UDP-galactosa (especialmente en las primeras ocho horas),
lactato y piruvato (durante las 15 horas finales) y esfingomielina,
glicerofosforilcolina y N-palmitoil-esfinganina. Por el contrario, se ha
detectado en las CG una disminución de los niveles de betaína, taurina y
oftalmate para intermediarios de rutas del metabolismo de carbohidratos (por
ejemplo, fosfoenolíruvato y 3-fosfoglicerato) y para la mayoría de
intermediarios en las rutas metabólicas de ácidos grasos/fosfolípidos (las más
bajas para acetilcarnitina, octanoilcarnitina y carnitina). En el medio de
maduración, los más importantes incrementos son para creatinina, varios
aminoácidos (incluyendo hipotaurina y ornitina), urea, lactato,
manitol/sorbitol, ribitol, piruvato, y para colinafosfato, mio-inositol,
glicerol y carnitina.
La interconexión comunicativa y la
cooperación metabólica entre el oocito y las células del cúmulus consisten en
interacciones mediadas por factores paracrinos y por uniones “gap” a través de
conexina 37. Hay uniones gap homologas entre las CG y uniones heterólogas entre
las CG y el oocito. Pequeñas moléculas se mueven directamente a través de las uniones gap entre las células
permitiendo el desarrollo de un acoplamiento metabólico. Un amplio espectro de nutrientes, incluyendo sustratos
energéticos, nucleótidos y aminoácidos son tomados por el oocito. Los canales
de las uniones gap también tienen funciones de señalización, ellos facilitan el
intercambio de compuestos de bajo peso molecular como el cAMP a través de la
membrana plasmática entre el oocito y las CG y entre las mismas CG. Hay una
clara evidencia en la literatura que el cAMP y otros derivados de purinas
juegan un rol crucial en el mantenimiento del oocito detenido en profase de la
meiosis I. El desamblaje de uniones gap
entre las CGM y las CGC resulta en un reducido aporte de sustancias al oocito
provocando la ocurrencia de VGD.
La interacción reguladora entre las CG y el
oocito es bidireccional. Los oocitos humanos expresan y secretan factores que
regulan la función de las CGM y las CGC, concretamente factor de
crecimiento-diferenciación 9 (GDF-9) y factor de crecimiento-diferenciación 9B=
proteína morfogenética de hueso 15 (BMP-15). Estas moléculas activan rutas de
señalización importantes para la diferenciación de CGC. Las CGC separadas del
oocito son incapaces de sintetizar ácido hialurónico y por tanto fallan en
experimentar la expansión. La síntesis de ácido hialurónico por las CGC es
estimulada por la hormona estimulante
del folículo (FSH).
El crecimiento y desarrollo del oocito
dependen significativamente de las interconexiones con las CG que proporcionan
los sustratos energéticos a través de las uniones gap. Los dos tipos de células
muestran preferencias diferentes por los sustratos energéticos para producir
ATP. Las CG dependen más de la glucólisis, mientras los oocitos dependen de la
fosforilación oxidativa mitocondrial. La proliferación de CG depende de la
regulación al alza de la ruta factor inducido por hipoxia-1α (HIF1α)- factor de
crecimiento del endotelio vascular (VEGF)-Akt y la activación de la glucólisis.
La importancia de la interconexión mutua de estas células es enfatizada por el
hecho que las CG proporcionan al oocito intermediarios producidos en la ruta
glucolítica (por ejemplo, piruvato y lactato). Varios estudios demuestran que
el número de CG que rodean al oocito juegan un rol importante (y positivo) en
su estatus energético (nivel de ATP). Las mitocondrias son esenciales para el
desarrollo normal y la viabilidad de los oocitos, un número bajo está asociado
con un significativo impacto negativo.
El envejecimiento tiene un efecto bien
descrito sobre la cantidad y la calidad mitocondriales. La calidad del oocito
disminuye con la edad materna y el deterioro mitocondrial asociado con la edad
está relacionado con esta disminución de la calidad del oocito. Varios estudios
describen una reducción en el número de copias de ADN mitocondrial, disminución
en el contenido de ATP e incremento en los niveles de especies reactivas de
oxígeno (ROS) en oocitos de varias especies animales. Más aún, los altos
niveles de ROS y SIRT1 (silent mating type information regulation 2 homolog 1)
en oocitos de bovino envejecida restringen la adecuada activación del sistema
de control de calidad mitocondrial y pueden causar disminución de la calidad
del oocito asociada con la edad.
Una apropiada coordinación de los procesos
metabólicos es crucial para la correcta maduración de los oocitos. Los niveles
de ATP y la expresión de genes de proteínas claves de la cadena transportadora
de electrones (CTE) fluctúan durante el proceso de maduración en los oocitos,
con niveles altos de ATP en los estadios
VGD y MII temprana. Las uniones gap
entre CGC y oocito están abiertas en el comienzo de la maduración del oocito,
mientras en los estadios más tardíos se cierran reduciendo la importancia de
las interconexiones mutuas y el paso de sustratos al oocito. La expresión de
genes asociados con la glucólisis en las CG y genes asociados con la CTE en los
oocitos aumenta durante los estadios finales de la maduración. Estos hallazgos
explican porque la disfunción mitocondrial afecta diferencialmente el contenido
de ATP en los oocitos dependiendo del estadio de su maduración.
El oxígeno es el nutriente más importante y
esencial para el crecimiento celular y el metabolismo energético, y el número
de CG y su metabolismo determinan la concentración de oxígeno folicular. Los
niveles de oxígeno en el líquido folicular humano aumentan rápidamente durante
los estadios antrales tempranos del crecimiento folicular, luego disminuyen a
niveles bajos en las fases antral tardía y pre-ovulatoria. La hipoxia activa la
glucólisis y el análisis de genes revela que los genes asociados con el HIF-1α
son regulados al alza en las CG durante el desarrollo normal del folículo. El
HIF-1α es el regulador clave de la
glucólisis y la fosforilación oxidativa en
CG y oocitos.
Las mitocondrias de las células germinales
femeninas experimentan cambios importantes durante la oogénesis, maduración y
fertilización. Ellas muestran dinámicos cambios morfológicos a medida que
aumentan en número y al mismo tiempo desarrollan complejas relaciones con otros
organelos celulares (por ejemplo, retículo endoplásmico liso y vesículas) de
acuerdo con las necesidades metabólicas y energéticas de la célula. El
principal rol de las mitocondrias es proporcionar moléculas de ATP a través del
metabolismo de carbohidratos y lípidos presentes en el citoplasma celular y el
medio. El embrión genera una gran cantidad de lactato durante cultivos in vitro
con una intensidad muy baja de oxidación de glucosa, solamente 10% de la utilización total de glucosa. Estos
datos pueden indicar que la actividad metabólica mitocondrial es baja durante
el desarrollo temprano del embrión, un metabolismo restringido a la utilización
de glucosa vía glucólisis, o una competencia por otros sustratos oxidables
(glutamina, piruvato) presentes en el medio de cultivo.
La glucosa es tomada por las CG a través de
transportadores GLUT y convertida en piruvato, el cual puede ser transferido
directamente al oocito a través de las
uniones gap, o secretado por las CG en el
medio que rodea al oocito. Las observaciones demuestran que la
maduración del oocito es posible en un medio que contiene glucosa pero
solamente en presencia de CG que producen piruvato u oxaloacetato. Por otra
parte, hay estudios que describen la presencia en el oocito de hexoquinasa,
glucosa-6-fosfato deshidrogenasa, enzimas de la ruta de pentosas fosfato, así
como también transportadores GLUT, lo cual sugiere un posible papel del
metabolismo de la glucosa en algunas funciones del oocito. El piruvato
transferido por las CG y los ácidos grasos son las fuentes más importantes de
sustratos para la producción de ATP en las mitocondrias del oocito en
maduración. Los oocitos son ricos en transportadores de ácido monocarboxílico
(MCT) que son capaces de transportar lactato.
Los lípidos son importantes en términos de
producción de energía durante la maduración del oocito y el establecimiento de un
oocito competente. En las CG se han encontrado gotas de lípidos y la
β-oxidación es predominante en ellas. La oxidación de ácidos grasos en las CG
aumenta en el complejo cúmulus-oocito. In vitro, la suplemetacion del medio de
maduración con ácido palmítico y ácido esteárico resulta en un efecto
perjudicial sobre la maduración del oocito.
Los tipos básicos de inhibidores/moduladores
mitocondriales (desacoplador CCCP, antimicina A inhibidor del complejo III y
oligomicina inhibidor de la sintetasa de ATP) tienen efectos negativos
profundos sobre la producción de ATP del oocito, mientras el ácido
bromopirúvico (AB) inhibidor de la glucólisis no tiene efecto negativo. Las CG
muestran un resultado opuesto: el AB reduce el contenido de ATP, mientras los
inhibidores mitocondriales no lo cambian. El complejo cúmulus-oocito tratado
con CCCP o 18α-ácido glicirretínico (18AG) inhibidor de uniones gap, muestra
una reducción de ATP en el oocito, donde el 18AG causa solo una leve reducción.
Un alto número de CG es capaz de mitigar parcialmente el efecto negativo del
CCCP sobre la producción de ATP en el oocito y un co-tratamiento con 18AG es
capaz de abolir el efecto. Estos resultados sugieren que el oocito depende
primariamente de la producción de ATP vía CTE, mientras las CG dependen
principalmente de la glucólisis. Una disfunción mitocondrial, por tanto,
solamente afecta el estatus energético del oocito, permitiendo a las CG actuar
como un proveedor de ATP para el oocito (vía uniones gap). Entonces, el oocito
depende de la autoproducción de ATP a través de las mitocondrias y del ATP
proporcionado por las CG. Por otra parte, la oligomicina, inhibidor de la ATP
sintetasa, causa una significativa disminución de ATP en el oocito, mientras el
inhibidor de la glucólisis ácido yodoacético (inhibe a la
gliceraldehido-3-fosfato deshidrogenasa),
no causa ninguna disminución.
El rol de las ROS en los procesos
fisiológicos y patológicos del cuerpo humano es bien conocido, junto con los
antioxidantes juegan un rol importante en la regulación de los procesos
reproductivos y la fertilidad en humanos. El desbalance oxidante/antioxidante
está involucrado en el desarrollo de enfermedades reproductivas de la mujer,
incluyendo síndrome de ovarios poliquisticos, endometriosis y preeclampsia. Los
defectos de la CTE mitocondrial causan severas deficiencias de ATP e
incrementan la generación de ROS. La sobre producción de ROS provoca, entre
otras cosas, daño del ADN mitocondrial con severas consecuencias sobre la
función mitocondrial. La endometriosis es un ejemplo ilustrativo de una
enfermedad cuya patogénesis involucra una sobre producción de ROS. Las
pacientes con endometriosis muestran
un líquido folicular que contiene
ROS, así como daños en el ADN nuclear en el oocito. La enfermedad puede
resultar en disfunción mitocondrial en las CG y causar estrés oxidativo y
apoptosis. Como consecuencia las CG de las mujeres con endometriosis tienen una
menor producción de ATP y una reducida capacidad para proteger al oocito con un
impacto negativo para la fertilidad de las pacientes. Sin embargo, las CG
tienen un significativo rol protector contra el daño oxidativo causado por las
ROS. Ellas tienen capacidad para proteger al oocito contra niveles bajos de H2O2
y *OH. El aumento de la concentración de H2O2 afecta dramáticamente el número de CG y esta
reducción en la capacidad antioxidante hace al oocito más susceptible al daño
oxidativo.
Las CG sintetizan glutatión (GSH), una
molécula antioxidante, que protege las células del daño oxidativo y apoya el
mantenimiento de la homeostasis redox. El GSH es un tripéptido tiol que se
encuentra en las células de los mamíferos, donde juega roles importantes en el
metabolismo redox, la destoxificación de xenobióticos y el transporte de
aminoácidos. Está demostrado que el GSH es un importante factor citoplasmático
del oocito. La modulación de los niveles de GSH durante la maduración del
oocito y la fertilización es crucial para la descondensación de la cromatina
del espermatozoide y la formación del pronúcleo masculino después de la
penetración del espermatozoide en algunas especies animales. Cuando comienza la
maduración del oocito aumenta el contenido de GSH en las CG. Sin embargo, la
protección del oocito contra el efecto perjudicial de las ROS proporcionada por
las CG tiene algunas limitaciones. Las bajas concentraciones de H2O2
y *OH pueden ser efectivamente destoxificados, mientras los efectos de altas
concentraciones de estas u otras ROS como HCIO no pueden ser prevenidos.
El cuerpo humano
está expuesto a una variedad de contaminantes ambientales (por ejemplo,
contaminación del aire, aditivos en los alimentos, toxinas y radiaciones) que
provocan genotoxicidad. Estos factores inducen daño a diferentes niveles,
incluyendo ADN del oocito o en las CG. El líquido folicular, el más importante
ambiente para un desarrollo adecuado del oocito, es también afectado
negativamente por estos factores. Con el incremento del cáncer en los últimos
años y el correspondiente incremento en el uso de terapia no quirúrgica
(quimioterapia y radioterapia), el riesgo de insuficiencia ovárica por estos tratamientos
es un problema altamente relevante. Las células en crecimiento de folículos
maduros e inmaduros son el blanco inicial de una exposición de larga duración a
agentes quimioterapéuticos. La muerte de células granulosas es detectable pocas
horas después de la radiación. Las toxinas ambientales conocidas como
disruptores endocrinos, (por ejemplo,
bisfenol A (BPA), un componente del plástico presente en el agua, el
aire y los alimentos), disminuyen la viabilidad de las CG e induce su
apoptosis. Asimismo, el bisfenol S (BPS) causa una insuficiencia en la
formación de microtúbulos y disrupción de
la expansión de las células del cúmulus. Estos hechos tienen un impacto
significativo sobre la calidad de los oocitos y por consiguiente en la
reproducción humana.
En conclusión, el crecimiento de los
folículos ováricos y el desarrollo y maduración de los oocitos son altamente
dependientes de –y son regulados por- un
acoplamiento metabólico y de señalización entre oocitos y CG. La comunicación
bidireccional es mediada por un amplio espectro de moléculas de señalización.
Esta interconexión coordinada es crucial para el manejo de sustratos
energéticos, componentes estructurales y iones para el oocito maduro a través
de uniones gap. Las CG y los oocitos tienen diferentes preferencias por los
sustratos energéticos, las CG son más glucolíticas, mientras los oocitos
dependen más de la ruta de la fosforilación oxidativa. Al mismo tiempo, los
oocitos reciben intermediarios producidos en la glucólisis por las CG. El
número de CG que rodean al oocito y su edad afectan el estatus energético del
oocito. Los factores ambientales, la predisposición genética y algunos métodos
terapéuticos pueden interrumpir estos procesos provocando cambios de los
perfiles metabólicos y de señalización en las células que disminuyen la calidad
de los oocitos, el desarrollo de enfermedades del tracto reproductivo femenino
y una menor fertilidad.
Fuente: Fontana J
et al (2020). Metabolic cooperation in the ovarian follicle. Physiological Research
69: 33-48.
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