Hormonas tiroideas y desarrollo del cerebelo
La expresión
organizada de genes específicos en tiempo y es espacio es responsable de la
organogénesis del sistema nervioso central (SNC). Los defectos en el desarrollo
del cerebro son inducidos por anormalidades en cantidad, tiempo o área de
expresión de genes. La regulación
epigenética de la expresión de genes es
regulada por un programa genético intracelular intrínseco en las células
neuronales y por varios estímulos, locales y periféricos, de otros tipos de
células. Los estímulos locales incluyen impulsos sinápticos y factores tróficos
en el cerebro. Los estímulos periféricos incluyen impulsos sensoriales del
sistema nervioso periférico e impulsos hormonales de células endocrinas. Estos
factores trabajan en conjunto y contribuyen al desarrollo y plasticidad del
cerebro. Adicionalmente, los factores ambientales son importantes
moduladores.
El cerebro consiste de complejas redes
interneurales. El cerebelo es uno de los pocos sitios en el cerebro en el cual
la red neural ha sido extensamente estudiada. La estructura de su corteza está
bien organizada, con un arreglo específico y uniforme de células y
microcircuitos. Las hormonas como estímulos periféricos influyen en el
desarrollo del cerebro incluyendo al cerebelo. Algunos receptores hormonales
son expresaos en el cerebelo. Entre las numerosas hormonas circulantes, algunas
hormonas lipofílicas incluyendo hormonas tiroideas (HT), hormonas gonadales y
glucocorticoides están involucradas en el desarrollo del cerebelo. Estas
hormonas son capaces de cruzar la barrera hematoencefálica (BHE), sus receptores pertenecen a la familia de
receptores nucleares (RN) y regulan la transcripción de genes de una manera
dependiente de ligando. Los RN están
ampliamente distribuidos en el SNC con perfiles de expresión específicos.
Particularmente, durante el desarrollo del cerebelo, los NR exhiben un patrón
de expresión temporal y espacial. Los HT son reguladores conocidos del
desarrollo del cerebelo. En roedores y humanos, el hipotiroidismo durante el
período de desarrollo postnatal resulta en morfogénesis anormal y alteración de
la función del cerebelo.
Las HT son sintetizadas a partir de tirosina
y yoduro en la glándula tiroides. La peroxidasa tiroidea y la oxidasa dual
(DUOX) juegan roles centrales en la incorporación de yoduro en los residuos
tirosina de la tiroglobulina. Las HT
incluyen L-triyodotironina (T3) y L-tetrayodotironina (tiroxina, T4). La T4 es
la principal HT producida en la glándula tiroides. La T3 es producida
directamente en la glándula tiroides o por desyodación de T4 en tejidos
periféricos. La desyodasa tipo 2 (DIO2) es la enzima dominante responsable de
la desyodación de HT en el cerebro. Las HT entran a la célula a través de
transportadores de la membrana como el transportador monocarboxilato 8 (MCT8).
Las HT se unen al receptor de hormona
tiroidea (RT) en el núcleo y regulan la transcripción de genes. La T3 posee
mayor afinidad por RT y es registrada como la forma activa de las HT. Los RT
contienen un dominio de unión a ADN (DBD) y un dominio de unión a ligando
(LBD), responsable de la dimerización del RT. Los RT son codificados por dos
genes, THRA y THRB, localizados en los cromosomas 17 y 3 en humanos. Estos
genes generan varias isoformas de RT. Tres isoformas RTα1, RTβ1 y RTβ2 unen HT
y sirven como factores de transcripción dependientes de ligando. Estas
isoformas son funcionalmente similares,
pero sus roles son distintos dependiendo de sus perfiles de expresión. El
RTα2 carece de capacidad para unirse a HT y trabaja como un inhibidor endógeno
de otros RT. Adicionalmente, son
producidas algunas proteínas truncadas como RT∆α1 y RT∆α2. Al menos en ratones,
estas dos proteínas funcionan como supresores transcripcionales in vivo. Más
aún, el RTβ3 y su proteína relacionada son registrados como isoformas menores.
El RT ejerce funciones bilaterales similares
al receptor de ácido retinoico y al receptor de vitamina D. El RT se une a secuencias específicas de
nucleótidos conocidas como elementos de
respuesta a RT (ERT) en sus genes blancos como homodímero, o como un
heterodímero con el receptor retinoide
X. En ausencia de ligando, complejos correpresores se unen al RT y suprimen la
transcripción. Cuando los complejos correpresores son liberados del RT, son
reclutados complejos coactivadores, los cuales estimulan la transcripción. Los
cofactores incluyendo correpresores y coactivadores pueden alterar la
estructura de la cromatina modulando la modificación de histonas o la
estabilidad de la maquinaria transcripcional basal. Estudios recientes indican
que el intercambio de cofactores no sigue un modelo “todo o nada” in vivo sino
que la expresión de genes blanco de RT es regulada por un desvío en la unión
relativa de correpresores y coactivadores.
Los genes blanco regulados al alza por el RT
son responsables de los efectos celulares de las HT. Estos efectos incluyen
algunas funciones celulares básicas como proliferación, migración y diferenciación, necesarias para
el desarrollo y la plasticidad del cerebro. Algunos estudios sugieren que la
acción no genómica de las HT a través de las integrinas αvβ3 de la membrana es
responsable de la proliferación celular. Las HT juegan roles importantes en la
maduración y diferenciación de numerosos tipos de células incluyendo neuronas y
células gliales. La diferenciación neural por HT contribuye a múltiples
fenómenos como alargamiento de axones, sinaptogénesis y arborización de
dendritas. Algunos ejemplos de genes blancos de HT responsables del desarrollo
del cerebelo son la proteína de célula de Purkinje-2 y la proteína básica de
mielina. Adicionalmente, los genes blancos regulados al alza por HT inducen
efectos secundarios o terciarios.
La deficiencia de HT durante el período
postnatal causa hipotiroidismo congénito (HC) en humanos. El HC no tratado
causa un pobre desarrollo neural en niños con retardo metal, ataxia cerebelosa,
sordera y alteración del crecimiento corporal. El cerebelo ha sido identificado
como una región sensible a HT durante el desarrollo cerebral. Una de las
principales causas de hipotiroidismo primario es la anormalidad en el
desarrollo de la glándula tiroides (disgenesia tiroidea). Otra causa son los
errores en la génesis de HT
(dishormonogénesis). Los modelos más comunes de HC en roedores son inducidos
por drogas anti-tiroideas como propiltiouracilo o 2-mercapto-1-metilimidazol
(MMI). Los estudios con estos modelos
reportan reducción del peso del cerebelo, prolongada proliferación celular en
la capa de células granulares externa, retardo en la diferenciación celular en
las capas molecular y granular interna, incremento en el número de células
granulares y astrocitos y disminución en el número de células en cesta. Otros
estudios reportan retardo en la mielinización, desconexiones sinápticas entre
neuronas del cerebelo y fibras aferentes de otras regiones del cerebro,
disminución de la arborización dendrítica de células de Purkinje, fibras
paralelas más cortas con pocos contactos sinápticos con las células de
Purkinje.
Además del hipotiroidismo inducido por
drogas en modelos animales, las mutaciones o modificaciones de genes que
regulan el desarrollo de la glándula tiroides han sido reportados como modelos
de HC. Por ejemplo, el gen PAX8 es requerido por las células foliculares de la
glándula tiroides de humanos y roedores.
Los ratones Pax8-/- muestran un defecto en la organización y
una reducción en la elaboración de dendritas que puede ser restaurado por el
tratamiento con HT. Los ratones “knockout” de gen Duoxa (Duoxa-/-),
el cual juega un rol en la síntesis de HT, muestran cambios morfológicos
similares en el cerebelo a los dos semanas postnatales con severo
hipotiroidismo y la disfunción persiste
a lo largo de la vida.
La resistencia a HT (RHT) es la categoría
más común de sensibilidad alterada a HT en humanos. La RHT es un síndrome que
se caracteriza por reducida acción intracelular de T3. Aproximadamente 85% de
las familias con RHTβ tienen mutaciones en el RTβ. Debido a defectos en la
regulación por retroalimentación del eje hipotálamo-hipófisis-tiroides (HHT),
los pacientes con RHTβ tienen altos niveles de T4 y T3 con niveles normales o
bajos de hormona estimulante de la tiroides (TSH). Los pacientes con RHTβ
presentan varios síntomas, algunos pacientes muestran hipertiroidismo mientras
otros exhiben hipotiroidismo. La diversidad de los síntomas puede deberse a las
diversas respuestas a los altos niveles de HT. Algunos estudios reportan que
los pacientes con RHTβ presentan una alta prevalencia de desórdenes de déficit
de atención y dificultades para el aprendizaje, similares a los síntomas de
hipertiroidismo. Dado que el RTα no está involucrado en la regulación del eje
HHT, los pacientes con RHTα tienden a tener bajos niveles de T4, niveles altos
de T3 y niveles bajos de T3 reversa (rT3). Los principales hallazgos clínicos
registrados en el SNC de pacientes RHTα son retardo mental y alteraciones
motoras, similares a los síntomas del HC. Los ratones con mutaciones RTα,
similar a los pacientes con RHTα, exhiben hipotiroidismo. El fenotipo cerebelar
de modelos animales con RHT es más severo que en los animales con RT “knockout”,
indicando que el desarrollo anormal del cerebelo que se observa en animales
hipotiroideos puede ser inducido principalmente por RT sin ligando. Más aún, el
efecto puede no ser un resultado de resistencia a HT generalizada sino una
resistencia específica de células del cerebelo a la acción de las HT. Esta
hipótesis es apoyada por estudios en modelos animales que expresan células del
cerebelo RT negativas-dominantes, con desarrollo aberrante del cerebelo.
Las HT requieren de transportadores para
pasar la BHE y alcanzar las neuronas en el cerebro. Dos transportadores
transmembrana, MCT8 y el polipéptido transportador de aniones orgánicos 1C1
(OATP1C1) transportan T4 y T3 de manera específica. El OATP1C1 tiene alta
afinidad por T4 y rT3, pero baja afinidad por T3. Los transportadores MCT8 y OATP1C1
están localizados en células neurales, células endoteliales de microvasos y
plexo coroideo. En particular, el MCT8 es esencial para transportar HT a través
de la BHE. Las mutaciones en MCT8 causan el síndrome Allan-Herndon-Dudley
(AHDS) que se caracteriza por función tiroidea alterada (niveles bajos de T4 y
niveles altos de T3) y neurodesarrollo severamente alterado. Los patrones de
expresión espaciotemporal de MCT8 contribuyen a la alta demanda de HT en el
cerebro en desarrollo. Los ratones Mct8-/- muestran un perfil
tiroideo con niveles relativamente bajos de T3 en diferentes áreas del cerebro,
pero no muestran mayores defectos en la histopatología cerebral ni cambios
conductuales. En particular, los ratones Mct8-/- no revelan efectos
sobre la morfología de las células de
Purkinje en el cerebelo. Las diferencias entre humanos y ratones sugieren que los
ratones MCT8-/- pueden tener un mecanismo compensatorio para suplir
HT a las neuronas como OATPC1 y DIO2. Esta hipótesis es apoyada por la mayor
expresión de OATPC1 en la BHE de roedores en comparación con humanos.
Las enzimas desyodasas juegan roles
importantes en la activación y desactivación de HT. En el SNC, la DIO2 es
predominantemente expresada en astrocitos y convierte la prohormona T4 en la
hormona activa T3. Por el contrario, la DIO3 es expresada principalmente en
neuronas y convierte T4 en rT3 y T3 en T2 en la inactivación de HT. El balance
entre actividad DIO2 y DIO3 puede determinar la concentración local de T3.
Adicionalmente, es conocido que el balance de DIO2/3 controla dinámicamente el
desarrollo del cerebelo en ratas. En la segunda semana postnatal, la DIO2 es
regulada al alza mientras la actividad DIO3 es regulada a la baja. Estos
cambios se correlacionan con las demandas de HT como mielinización y
sinaptogénesis en un período sensible en el cerebelo de ratones.
La acción de HT es mediada por RT y varios
factores transcripcionales. Los coactivadores de receptores nucleares (NCoA) y
correpresores (NCoR) se unen a receptores nucleares, incluyendo RT, de una
manera dependiente de ligando y median las actividades transcripcionales. Los
NcoA son expresados en el SNC, pero poco se conoce de sus roles fisiológicos en
las neuronas. Recientemente, comienzan a emerger reportes de variantes
genéticas de NCoA en condiciones relacionadas con el SNC en humanos. Por
ejemplo, variantes genéticas en NCoA han sido encontradas en pacientes
pediátricos con discapacidad intelectual o desórdenes del espectro autista. El
NCoA1 es predominantemente expresado en células de Purkinje y células
granulares del cerebelo en desarrollo de ratas.
El RT, además de NCoA y NCoR, puede
interactuar con otros RN que regulan la expresión de genes como el receptor
orfan relacionado con ácido retinoico α (RORα). El RORα es expresado en células
de Purkinje y juega un rol crítico en el desarrollo del cerebelo. El RORα puede
estar involucrado en la expresión de genes
regulados por HT en el desarrollo del cerebelo. En efecto, en ratas, las HT
regulan la expresión de RORα en las primeras dos semanas postnatales, indicando
que las HT pueden alterar la expresión de genes críticos para el desarrollo del
cerebelo a través de la regulación de RORα. Más aún, el RORα aumenta la
transcripción mediada por RT. El RORα también puede interactuar con el RT sin
unirse a los ERT. Los resultados de los estudios indican que el RORα es requerido
para la función completa del RT en el cerebelo en desarrollo.
En conclusión, la expresión organizada de
genes específicos en tiempo y espacio es responsable de la organogénesis del
SNC incluyendo al cerebelo. Está establecido que las HT juegan un rol critico
en el desarrollo del cerebelo. En humanos y roedores, el hipotiroidismo durante
el desarrollo postnatal resulta en morfogénesis anormal o función alterada del
cerebelo. Las HT se unen a RT en el núcleo y con la ayuda de cofactores regulan la transcripción de genes. La
regulación de genes por RT induce proliferación, migración y diferenciación que
son necesarias para el desarrollo y la plasticidad del cerebro. Por tanto, la
carencia de mediadores de la acción de HT puede causar directamente un
desarrollo aberrante del cerebelo.
Fuente: Ishii S et
at (2021). The role of thyroid hormone in the regulation of cerebellar
development. Endocrinology and Metabolism
36: 703-716.
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