Fisiología de la leptina
La leptina es un péptido de 167 aminoácidos
expresado principalmente en el tejido adiposo blanco, pero que también
se encuentra en otros tejidos como placenta, glándula mamaria, ovario, músculo
esquelético, estómago e hipófisis. Los niveles circulantes de leptina se
relacionan directamente con la cantidad de grasa en el cuerpo y fluctúan de acuerdo con los cambios en la ingesta
calórica con una marcada disminución durante el ayuno. La secreción de leptina
es pulsátil y exhibe un ritmo circadiano con
niveles más bajos en el mediodía y
niveles más altos en la media noche. El patrón pulsátil de la secreción
de leptina es similar en sujetos obesos
y sujetos delgados, pero la amplitud de los pulsos es mayor en los sujetos
obesos. Por otra parte, los niveles circulantes de leptina exhiben un dimorfismo
sexual, aunque los niveles deleptina disminuyen después de la menopausia, las
mujeres tienden a tener mayores niveles que los hombres aún después de controlar la masa grasa del cuerpo, lo
cual sugiere un rol delos esteroides sexuales. La grasa subcutánea produce más
leptina que la grasa visceral y esto puede, en parte, contribuir a los mayores
niveles de las mujeres. Además delos esteroides sexuales, los niveles deleptina
son regulados por la insulina, los glucocorticoides, las catecolaminas y las
citoquinas. Los individuos obesos
exhiben altos niveles de leptina en el tejido adiposo y niveles circulantes elevados. Estos altos
niveles no reducen el exceso de adiposidad, lo que indica resistencia a la
leptina. Más aún, en sujetos obesos, la
administración de leptina exógena tiene
poco efecto sobre la grasa corporal. Los mecanismos que subyacen a la
resistencia a la leptina incluyen la disrupción
de la señal leptina en el hipotálamo y otras regiones del sistema
nervioso central, alteraciones en el transporte
de leptina a través de la barrera
hemato-encefálica, inflamación hipotalámica, estrés de retículo endoplasmático
y autofagia.
La leptina ejerce sus efectos a
través de receptores específicos (LepR) de los cuales se han identificado
cuatro isoformas en los humanos. La isoforma larga (LepRb), el principal
receptor de leptina, es altamente expresada en hipotálamo y otras regiones cerebrales, regula la
homeostasis energética y otras funciones neuroendocrinas. Mientras el LepRb es
el principal responsable de la supresión de la
ingesta de alimentos y la estimulación del gasto de energía, las
isoformas cortas del lepR son mediadoras
del transporte de leptina a través de la barrera hemato-encefálica. La evidencia sugiere que el transporte de
leptina en el hipotálamo es mediado por los tanicitos a través de la activación del LepRb.
La unión de la leptina al LepRb
activa varias rutas de señalización, incluyendo entre otras (a) Janus quinasa 2
(JAK2)/transductor de señal y activador
de la transcripción 3 (STAST 3), (b) sustrato de receptor de insulina (IRS)/fosfatidilinositol
3 quinasa (PI3K), (c) proteína tirosina fosfatasa que contiene SH2 (SHP2)/proteína
quinasa activada por mitógenos (MAPK), (d) proteína quinasa activada por
5´monofosfato de adenosina (AMPK)/acetil-CoAcarboxilasa (ACC). La activación de
la ruta JAK2/STAT3 juega un rol crucial en la capacidad de la leptina para
regular la homeostasis energética. La cascada de señalización intracelular de
la leptina es interrumpida por el supresor de la señal citoquina 3 (SOCS3) que
inhibe la ruta JAK2/STAT3 a través de un asa de retroalimentación
negativa. En la inhibición de la señal
leptina también está implicada la proteína tirosina fosfatasa 1B (PTP1B).
La leptina actúa sobre neuronas que expresan LepRb en el cerebro. En el
núcleo arcuato del hipotálamo, la leptina interactúa con un complejo circuito
neural para controlar la ingesta de alimentos a través de la activación de neuronas anorexigénicas que
sintetizan pro-opiomelanocortina (POMC) y transcripto regulado por cocaína y
anfetamina (CART) y la inhibición de
neuronas orexigénicas que sintetizan péptido relacionado con agouti (AgRP) y
neuropéptido Y (NPY). Durante el ayuno,
los niveles circulantes de leptina disminuyen rápidamente. La disminución deleptina
estimula la expresión de AgRP y NPY y suprime la expresión dePOMC y CART, incrementando por tanto la
ingesta de alimentos y disminuyendo el gasto energético. El hipotálamo lateral
contiene neuronas que expresan hormona concentrante de melanina (MCH) y orexinas, las cuales son
disminuidas por la leptina con la consiguiente disminución de la ingesta de
alimentos. Recientemente ha sido
identificada en el hipotálamo lateral una tercera población de neuronas que expresan
LepRb e inervan el área tegmental ventral (VTA) relacionando a la leptina con
el control hedónico de la ingesta de alimentos mediado por el sistema
dopaminérgicomesolímbico. Entonces, la leptina modula el sistema
dopaminérgicomesolímbico indirectamente a través del hipotálamo lateral. Sin
embargo, las neuronas del VTA que
expresan LepRb responden directamente a
la leptina y suprimen la ingesta de alimentos. La leptina también actúa sobre
neuronas del hipotálamo ventromedial (VMH) que expresan el factor de
transcripción esteroidogénico 1 (SF-1). Los ratones con alteraciones en el SF-1
delas neuronas del VMH son susceptibles
a obesidad inducida por dieta. En el VMH, el factor neurotrófico derivado del
cerebro (BDNF) también ha sido involucrado
en los efectos de la leptina sobre la ingesta de alimentos y el balance
energético.
El LepRb también se encuentran en poblaciones de neuronas que expresan péptido similar a glucagón 1
(GLP1) y colecistoquinina (CCK) en el
núcleo del tracto solitario (NTS) del cerebro anterior. Aparentemente, en el
NTS, la leptina actúa sinérgicamente con
GLP1 y CCK para promover la saciedad. La
leptina, además de regular la ingesta de alimentos, incrementa el gasto de
energía a través del sistema nervioso
simpático. En roedores, la leptina estimula la termogénesis en el tejido adiposo
marrón a través del incremento en la
expresión de la proteína
desacopladora 1 (UCP 1). El efecto termogénico de la leptina es mediado en parte por la supresión de MCH y el factor
de transcripción FoxO1. Los ratones que carecen de leptina y MCH tienen menos masa grasa que los ratones
que carecen solo de leptina. Adicionalmente, la leptina tiene un efecto
neurotrófico sobre las neuronas hipotalámicas implicadas en la ingesta de
alimentos y la homeostasis energética, así como también sobre neuronas
corticales e hipocampales. Los ratones con deficiencia de leptina o LepRb tienen reducción del peso cerebral con
disminución del volumen cortical y anormalidades estructurales de las neuronas,
lo que sugiere que la leptina tiene un
rol en el crecimiento cerebral y en el desarrollo neuronal. Además de su rol en
el desarrollo neuronal temprano, la leptina modula la plasticidad
sináptica en adultos.
Los niveles de leptina en tejido adiposo y plasma caen rápidamente durante
el ayuno. Los niveles circulantes de leptina disminuyen en sujetos con
sobrepeso después de un balance negativo
debido a ejercicio o restricción calórica, lo que indica que los niveles
de leptina reflejan el estatus energético del individuo. Los bajos niveles de leptina durante el ayuno
disparan respuestas metabólicas y hormonales en ratones y en humanos, las
cuales incluyen hiperfagia, hipogonadismohipogonadotrópico y disminución delos
niveles de hormonas tiroideas y hormona de crecimiento. Los cambios hormonales
son similares a los observados en la deficiencia congénita de leptina, esto es,
hipogonadismo y desarrollo puberal deficiente. La leptina previene el retardo puberal asociado con baja ingesta calórica y ejerce
un efecto permisivo sobre el inicio de la pubertad en ratones normales. Los bajos
niveles deleptina se relacionan con alteraciones en la pulsatilidad de la leptinae
hipogonadismo en casos de amenorrea hipotalámica. El tratamiento con
leptina incrementa la frecuencia de
pulsos y los niveles de LH, los niveles
de estradiol y corrige los niveles anormales de cortisol y hormonas tiroideas
en pacientes con amenorrea hipotalámica.
Las neuronas que producen hormona liberadora de gonadotropinas
(GnRH) carecen de LepR, lo cual sugiere una acción indirecta de la
leptina sobre estas neuronas vía NPY, POMC y kisspeptina. Una pequeña población
de neuronas Kiss en el núcleo arcuato expresa LepR, pero la señal leptina en
estas neuronas ocurre después de la maduración sexual completa y no es
crucial para la acción de la leptina durante la pubertad. La leptina altera la
regulación de hormonas tiroideas a través de múltiples rutas. Por ejemplo,
incrementa los niveles de hormona liberadora de tirotropina (TRH) a través de la regulación de la expresión del gen proTRH y el aumento de la conversión de proTRH en
TRH madura. Los individuos sanos tiene niveles circadianos y pulsátiles de leptina y hormona estimulante de tiroides
(TSH), mientras que los sujetos con
deficiencia congénita de leptina presentan una secreción altamente
desorganizada de TSH. Después del
tratamiento con leptina recombinante, los individuos con deficiencia de leptina
exhiben niveles aumentados de hormonas tiroideas pero sin cambios en los
niveles de TSH. La administración de leptina previene la supresión de los
pulsos de TSH inducida por el ayuno pero
no revierte la caída de los niveles de T3. En las mujeres con
amenorrea hipotalámica, la administración de leptina incrementa los niveles de
T3 y T4 pero no los de TSH. Por otra parte, los ratones
con deficiencia de leptina tienen
reducción del crecimiento lineal, supresión del eje GH-IGF1 y niveles
marcadamente aumentados de ACTH y
corticosterona. Sin embargo, los humanos
con deficiencia congénita de leptina tienen crecimiento lineal y función adrenal normales. Los mecanismos que subyacen a las diferencias
entre las especies en la regulación de
la hormona de crecimiento y del eje
hipotálamo-hipófisis-adrenal por parte de la leptina no son muy claros.
La deficiencia congénita de leptina conduce aalteraciones características del síndrome metabólico en
individuos obesos, pero con el reemplazo de leptina disminuyen dramáticamente
la resistencia a la insulina, la esteatosis, la dislipidemia y los niveles de
glucosa. En sujetos con deficiencia
moderada, la leptina no revierte la hiperglicemia pero disminuye los niveles hepáticos y plasmáticos
de triglicéridos. El tratamiento con leptina causa una disminución
preferencial de grasa visceral en ratas,
promoviendo la redistribución de la grasa corporal. ¿Cómo regula la leptina el
metabolismo de carbohidratos y lípidos? En ratones diabéticos no obesos, la
administración periférica de leptina
normaliza la glicemia suprimiendo
los niveles de glucagón y varios metabolitos
hepáticos. La administración
central de leptina también disminuye los niveles de glucosa y glucagón pero a
través de mecanismos independientes de la insulina. La evidencia reciente
sugiere que la leptina afecta la sensibilidad periférica a la insulina a través
de mecanismos en el sistema nervioso central independientes de sus efectos
sobre la ingesta de alimentos y el peso corporal. La leptina suprime la producción hepática de
glucosa en parte mediante la disminución
de los niveles de glucagón y el incremento de la captación periférica de
glucosa a través de mecanismos que involucran a las neuronas del núcleo arcuato
que expresan POMC y AgRP. Más aún, la leptina incrementa la fosforilación de
AMPK y mejora la sensibilidad a la insulina en músculo esquelético a través de la activación de PI3K en el hipotálamo. Adicionalmente, la leptina altera la
homeostasis de la glucosa a través de la insulina. La leptina inhibe la
expresión del gen de insulina y la secreción de insulina estimulada por
glucosa, estas acciones adaptan los niveles de glucosa a la cantidad de grasa corporal. La insulina, su vez, estimula la síntesis y secreción de
leptina, estableciéndose un eje tejido adiposo- islotes pancreáticos. La leptina también protege a las células β del páncreas de la
lipotoxicidad en varios modelos animales. La leptina regula el metabolismo de
lípidos mediante mecanismos independientes
de la ingesta de alimentos. La administración central de leptina inhibe
la lipogenesis de novo y estimula la lipólisis
en tejido adiposo e hígado vía
activación del sistema nervioso
simpático. La leptina estimula la
oxidación de ácidos grasos regulando positivamente al receptor activado por el
proliferador de peroxisomas γ (PPARγ) y disminuyendo los depósitos de
triglicéridos en tejido adiposo blanco e hígado. La leptina también estimula la
oxidación de ácidos grasos a través de
la activación de AMPK en músculo esquelético. La alteración del LepR en órganos
periféricos no tiene un impacto
significativo sobre el metabolismo, lo
que sugiere que la leptina actúa
principalmente en el cerebro para influir en el metabolismo de glucosa y lípidos.
Por otra parte, la leptina modula el
metabolismo óseo tanto central como periféricamente. En roedores, la leptina
regula la formación dehueso cortical vía estimulación adrenérgica o a través
del eje GH/IGF1. La leptina también influye
en el metabolismo del hueso cortical a través de neuropéptidos en el
hipotálamo como el NPY, un inhibidor de la formación de hueso cortical.
Periféricamente, la leptina actúa sobre las células del estroma de la medula ósea
para aumentar la diferenciación, proliferación y mineralización de osteoblastos. El efecto de la leptina
sobre la biología del hueso es
evidente es los estados de deficiencia deleptina.
Por ejemplo, el tratamiento con
leptina incrementa los niveles de
marcadores de formación de hueso y la
densidad mineral en pacientes con
amenorrea hipotalámica. Estos efectos de la leptina pueden involucrar la acción
directa sobre el hueso así como incrementos en los niveles de IGF1 y estradiol
y reducción de los niveles de cortisol. Asimismo, la leptina ejerce efectos
anti-osteogénicos a través de la activación del sistema nervioso simpático. La
activación simpática inhibe la formación
de hueso e incrementa la resorción ósea mediada por receptores adrenérgicos β2
en los osteoblastos.
El músculo esquelético de humanos expresa bajos niveles de LepRb. La
leptina incrementa la captación de glucosa y la oxidación de ácidos grasos en el músculo esquelético. La administración
periférica y la infusión central de leptina incrementan la proteína
ligadora de IGF-2 (IGFBP-2) en los
miotúbulos de músculo esquelético y mejoran la homeostasis de la glucosa. Los receptores y la
señal de la leptina en músculo
esquelético, especialmente en las piernas, están disminuidos en sujetos obesos,
lo que sugiere un potencial mecanismo de resistencia a la leptina en la
obesidad. El ejercicio intenso
intermitente activa la AMPK, la cual también es
activada por la leptina en músculo esquelético de humanos. Más aún, el
ejercicio en condiciones de ayuno aumenta la señal leptina en el músculo
esquelético. En roedores obesos, el ejercicio prolongado suprime la actividad
de la PTP1B en el hipotálamo y mejora la señal leptina. El envejecimiento está
asociado con desregulación de la señal leptina en el músculo esquelético.
Varios estudios han demostrado el rol de la leptina en la modulación de la
inmunidad innata y adaptativa. La leptina estimula la quimiotaxis de los neutrófilos y promueve la fagocitosis
y la producción de citoquinas pro-inflamatorias. Un estudio reciente ha
demostrado que la leptina actúa como una
señal negativa para la proliferación de células T reguladoras al tiempo que
estimula las células T ayudadoras. La
leptina, por lo tanto, puede contribuir a la protección contra las infecciones
y al desarrollo de la autoinmunidad. En comparación con sujetos sanos, los
individuos con deficiencia congénita deleptina tienen una mayor incidencia de infecciones, probablemente debido a
reducción de células T CD4+
circulantes y a alteraciones en la
proliferación de células T y la
liberación de citoquinas, lo cual es
normalizado con la administración de leptina.
En conclusión, la leptina es una hormona secretada por los adipocitos que
regula la ingesta de alimentos, la homeostasis energética, el metabolismo,
varias funciones neuroendocrinas y la
función inmune a través de sus efectos sobre el sistema nervioso central y
tejidos periféricos. Sin embargo, la
leptina actúa principalmente sobre blancos neuronales en el cerebro. El remplazo de leptina es una
terapia efectiva para restaurar las anormalidades metabólicas y neuroendocrinas
en los casos de deficiencia congénita de
leptina. Por el contrario, los individuos obesos son resistentes a la leptina.
Fuente: Park HK y Ahima RS (2015). Physiology of leptin: energy homeostasis, neuroendocrine function and
metabolism. Metabolism Clinical and Experimental 64: 24-34.