Efectos de los esteroides
sexuales sobre las neuronas kisspeptina
La kisspeptina es producida a partir
de un pro-péptido de 145 aminoácidos codificado por el gen KISS1. El
pro-péptido es clivado proteolíticamente para producir un péptido de 54
aminoácidos con un residuo
arginina-fenilalanina-amida en el C terminal. La kisspeptina-54 puede ser
procesada para producir péptidos más cortos como kisspeptina-14,
kisspeptina-13, kispeptina-10, todas ellas con actividad biológica. La kisspeptina y su receptor Kiss1R
(anteriormente conocido como GPR54) son requeridos para la pubertad y la
función reproductiva normal. La kisspeptina puede tener alguna actividad
agonista sobre otros receptores acolados a proteína G. La kisspeptina ejerce su efecto reproductivo
directamente y específicamente sobre las neuronas GnRH. La mayoría de neuronas
GnRH expresan Kiss1R.
Las neuronas Kiss1 se localizan primariamente en los núcleos anteroventral
periventricular (AVPV) e infundibular o arcuato (ARC) del hipotálamo. Una
pequeña población de neuronas que expresan el gen KISS1 ha sido identificada en
la amígdala medial en roedores adultos
de ambos sexos. Adicionalmente, la kisspeptina se ha encontrado en una variedad
de tejidos no neurales, incluyendo placenta, páncreas, gónadas, hipófisis y
tejido adiposo, pero muy poco se conoce acerca de la función o regulación de
estas poblaciones no neurales. Las poblaciones de neuronas Kiss1 de AVPV y ARC
difieren notablemente en sus proyecciones eferentes y en la coexpresión de otros neuropéptidos y neurotransmisores. En primer lugar, las
neuronas Kiss1 de AVPV proyectan sus fibras
a regiones donde se localizan los cuerpos de las neuronas GnRH. Por el contrario, las
neuronas KISS1 de ARC proyectan sus fibras hacia los axones o terminales de las
neuronas GnRH en la eminencia media. En
segundo lugar, el fenotipo de las dos poblaciones de neuronas KISS1 difiere con
respecto a la coexpresión de otros genes. Específicamente, la mayoría de
neuronas Kiss1 de AVPV son dopaminérgicas y también expresan galanina o
metaencefalina. Por el contrario, las neuronas Kiss1 ARC coexpresan
neuroquinina B (codificada por el gen TAC2) y dinorfina, así como el receptor
de neuroquinina B (TACR3). Aunque los
roles de estos cotransmisores no están muy claros, las diferencias fenotípicas
entre las poblaciones KISS1 de AVPV y ARC subyacen a importantes diferencias en sus funciones
biológicas. Por ejemplo, el hallazgo de la ceoexpresión kisspeptina-neuroquinina
B-dinorfina en las neuronas Kiss1 de ARC
ha dado lugar a la propuesta de un
modelo en el cual la neuroquinina B y la dinorfina trabajan de manera cíclica y
autocrina/paracrina para regular la
descarga neuronal pulsátil en ARC que, a su vez, gobierna la pulsatilidad de las neuronas
GnRH.
El AVPV es conocido como la región
hipotalámica que media la retroalimentación positiva de los estrógenos que
produce el pico preovulatorio de LH, y las neuronas Kiss1 constituyen un factor
importante en este proceso. Casi todas las neuronas Kiss1en el AVPV
expresan el receptor de estrógenos α
(ERα), lo que sugiere una ruta directa por la cual los estrógenos podrían
estimular estas neuronas. Aunque, al menos en hembras, las neuronas Kiss1 de AVPV también
expresan ERβ, se ha demostrado que el
ERα es el receptor primario en la regulación de la expresión del gen KISS1. La acción estimuladora de los estrógenos sobre
las neuronas Kiss1 de AVPV ocurre a través de la ruta de señalización “clásica”
mediada por ERα. Los andrógenos como la testosterona también pueden incrementar
la expresión del gen KISS1 en el AVPV, pero no los andrógenos no aromatizables
como la dihidrotestosterona, lo que sugiere que el efecto estimulador de la
testosterona se debe a la aromatización que los convierte en estrógenos. Además del
hecho que los estrógenos estimulen las neuronas Kiss1 del AVPV, hay otras
evidencias que relacionan a estas neuronas con el mecanismo que subyace al pico
preovulatorio de LH inducido por los estrógenos. (1) La expresión del gen KISS1
aumenta en el tiempo del pico de LH. (2) El gen KISS1 y la activación de las
neuronas Kiss1 son regulados circadiamente en sincronía con el pico de LH, y las neuronas Kiss1 del AVPV reciben impulsos neurales directamente del
núcleo supraquiasmático, el “reloj” circadiano master. (3) El pico preovulatorio de LH es
sexualmente dimórfico, solamente las hembras son capaces de producir un pico de
LH en respuesta a los estrógenos. Las
neuronas Kiss1 son sexualmente diferenciadas en el AVPV (en las hembras el AVPV
es considerablemente mas grande que en los varones debido a un mayor número de células y al
mayor volumen celular), en concordancia con el dimorfismo sexual del pico de
LH. (4) El pico de LH es dependiente de la señal kisspeptina, no ocurre en
casos de ausencia o mutación del gen KISS1 o después del bloqueo farmacológico
del Kiss1R.
En contraste con la población de neuronas Kiss1 del AVPV, las neuronas
Kiss1 del ARC son reguladas negativamente por los estrógenos en hembras y
varones. La testosterona también puede regular negativamente la expresión del gen KISS1 en el ARC. Sin
embargo, a diferencia del AVPV, este efecto puede ser mediado por el receptor
de andrógenos, pues la dihidrotestosterona también es capaz de reprimir los niveles de KISS1 en el ARC. La regulación negativa de las neuronas Kiss1
en el ARC puede ocurrir a través de rutas de señalización “no clásicas”
(independientes de la unión del ERα con los elementos de respuesta a los
estrógenos en el promotor de KISS1), pues los estrógenos pueden reprimir la
expresión de KISS1 en ratones que carecen de un dominio funcional de unión
estrógeno-ADN. Sobre la base de la
capacidad de estrógenos y andrógenos para inhibir la
expresión de KISS1 en el ARC, la población de neuronas Kiss1 ha sido propuesta como mediadora de la retroalimentación
negativa, inducida por esteroides sexuales, del eje reproductivo y responsable
de generar el pulso secretor de GnRH (en oposición al AVPV, responsable de la
generación del pico de GnRH pero no de su pulsatilidad). El apoyo de este modelo deriva de los registros electrofisiológicos de la actividad
del ARC en roedores y animales superiores que demuestran que los pulsos de LH
se correlacionan con los pulsos eléctricos
en las neuronas del ARC, y ha sido reforzado por las acciones
autocrinas/paracrinas de neuroquinina B y dinorfina sobre las neuronas Kiss1
del ARC.
¿Cómo actúan los esteroides sexuales, particularmente los estrógenos, en el
“período crítico” perinatal para inducir la diferenciación sexual del AVPV? Al
respecto se han considerado varias posibilidades: apoptosis diferencial,
neurogénesis diferencial y silencio de genes. La apoptosis puede contribuir a
las diferencias sexuales cuando las células de un núcleo cerebral entran en un
proceso de “suicidio celular” en un sexo pero no en el otro. Este mecanismo
está involucrado en algunos casos de diferenciación sexual y los marcadores
apoptóticos pueden ser observados en el cerebro de un sexo pero no en el otro
durante el período de diferenciación sexual. En este sentido, estudios
recientes sugieren que la apoptosis mediada por BAX, un factor `pro-apoptosis,
es requerida para la diferenciación sexual del tamaño del AVPV. Esto ha dado
lugar a la hipótesis que establece que la apoptosis mediada por BAX también es
requerida para la diferenciación sexual
en la expresión del gen KISS1 en el AVPV. Este modelo señala que hembras y varones podrían comenzar con
el mismo número de neuronas kiss1 y luego, en respuesta a la exposición perinatal a esteroides sexuales, los varones podrían
perder una gran porción de estas células debido a la apoptosis. La neurogénesis diferencial entre los sexos
es, en teoría, otro posible mecanismo por el cual podrían desarrollarse las diferencias
sexuales de las neuronas Kiss1 del AVPV. Los eventos de la neurogénesis
postnatal son un modo poco común de diferenciación sexual, pues la neurogénesis
es un evento bastante raro en la neurobiología postnatal normal. Sin embargo,
hay ejemplos de diferencias sexuales en la neurogénesis de bulbo olfatorio e
hipocampo. Entonces, se podría especular que lo bajos niveles perinatales de
esteroides sexuales en las hembras
podrían promover la mitosis en la neuronas Kiss1 del AVPV generando más neuronas, mientras que
los altos niveles de testosterona en
varones podrían inhibir los procesos mitóticos reduciendo, por tanto, el número
de neuronas Kiss1. Al presente se
dispone de poca evidencia que apoye este
modelo. Otro mecanismo que podría estar involucrado en la
diferenciación sexual de la expresión del gen KISS1 es la modificación epigenética que activa o silencia la expresión de un
gen a través de cambios en la estructura
de la cromatina. Algunos mecanismos
epigenéticos como acetilación de histonas
y metilación del ADN han sido relacionados con diferencias sexuales neuronales reportadas en la estría terminalis
y el área preóptica, pero hasta ahora dicha relación no ha sido demostrada en
las neuronas Kiss1 del AVPV.
Con respecto a la población de neuronas Kiss1 del ARC, los datos recientes
señalan que no es marcadamente dimórfica
en el adulto; pero en los períodos neonatal y juvenil si presenta
características sexuales dimórficas, esta diferencia sexual desaparece antes
que comience la pubertad. Al parecer la
diferencia sexual neonatal en los
niveles de KISS1 en el ARC es debida a
efectos activacionales (temporales) causados por las variaciones en los niveles
circulantes de esteroides sexuales. En cuanto al período
juvenil, los mecanismos hormonales que subyacen a la diferencia sexual no están claros. Estudios recientes, particularmente
en roedores, sugieren que hay factores gonadales, como los esteroides sexuales,
que normalmente inhiben la expresión de KISS1 en el ARC durante el período
puberal, pero la identidad de estos
factores reguladores, sus mecanismos de acción específicos y su relación
funcional con el progreso de la pubertad no han sido determinados.
Fuente:
Poling MC y Kauffman AS (2013). Organizational and activational effects of sex steroids on kisspeptin neuron
development. Frontiers in
Neuroendocrinology 34: 3-17.
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